16.10.08

Después de todos estos años que viví y experimenté diferentes cosas, pude aprender a valorar muchísimo más lo que tengo al lado (o lo que no). Aprendí a disfrutar de cada momento como si fuera el último. Aprendí a entender a las personas como quiero que me entiendan a mí. Aprendí a escuchar y de ahí sacar cosas que me sirvan a mí en mi vida cotidiana. Sin embargo, hay cosas que quedaron en veremos. No entiendo la capacidad que tienen ciertas personas de querer buscarle la quinta pata al gato, cuando en realidad no-la-hay. Se hacen una historia de algo que increíblemente no es, filman una película en sus mentes cuyo objetivo o moraleja no logro comprender. Es feo ver como las personas tratan de encontrar el más mínimo detalle para pasar directamente a la defenestración sin causa alguna, más que sus propias erróneas conclusiones. ¿Les importa tanto la vida de los demás? ¿Acaso no les alcanza con la suya que tienen que buscarle imperfecciones a la de los que tienen al lado? Tengo la sensación que ya no puedo decir, escribir o hacer nada, que después no tenga como resultado una crítica. Si hay alguna razón por la que escribo, la respuesta es simplemente por mí. Por y para mí. Para desahogarme un poco de lo que tengo que soportar en mis pensamientos permanentemente. Para descargar lo que siento o pienso. En fin, espero que haya quedado en claro la idea de este texto.